Formar hábitos de colaboración en casa en los niños es tan importante como enseñarles a compartir, estudiar etc.…. Pues a
través de ellas aprenderán a mirar y a
escuchar, y lo que es más importante, aprenderán a cuidar su entorno y a asumir
responsabilidades.
Tenemos que partir de que a la mayoría de los niños cuando
son pequeños les encanta participar en los quehaceres que realizan los adultos.
Ayudar a papá o a mamá no es un aburrimiento, sino algo divertido que les hace
sentirse importantes. Les gusta poner la ropa sucia en el cesto y los desperdicios
en la papelera.
Tengamos en cuenta que el niño no podrá adquirir
el hábito de ayudar y colaborar en casa si hay alguien que siempre haga las
cosas por él.
Las tareas deben ser apropiadas a la edad y capacidad de los
niños y se irán modificando a medida que crezcan y aprendan a valerse por si
mismos, Cuando los quehaceres cambien ellos serán capaces de pensar con ilusión
nuevas responsabilidades.
Algunas sugerencias para que el niño desarrolle las
actitudes y hábitos de colaboración.
- Establecer el momento para que realice la tarea, Por ejemplo: que ayude aponer la mesa antes de comer o que recoja sus juguetes antes de bañarse
- Mostrar al niño cómo ha de hacer el trabajo, explicárselo al tiempo que ser realiza y dejar que sea él quien lo remate
- Elogiarle a menudo ¡Estas poniendo las servilletas muy bien!
- Si comete algún error ayudarle a llevar a cabo correctamente el trabajo ya volverá a practicarlo al día siguiente.
- Tan pronto como el niño sepa realizar la mayor parte de la tarea es importante compensarle con cosas que le gusten.
- No hacer jamás las labores asignadas al niño si se le olvida: si se hace así no llegará a asimilar que son responsabilidad suya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario