viernes, 23 de agosto de 2013

LAS MARIONETAS COMO RECURSO EDUCATIVO


 

El interés por las marionetas en los niños empieza desde muy temprana edad, ya que la posibilidad de controlar un “personaje” en todo lo que hace y dice es una fuente de diversión, además, de una vía para desarrollar el lenguaje y la coordinación óculo manual entre otras.

Pero las marionetas a medida que el niño crece van adquiriendo otras dimensiones en el desarrollo. Muchas veces, los niños utilizan las marionetas como vía para expresar sus propios sentimientos y pensamientos,  ya que a menudo les resulta más fácil charlar con otros usando los personajes de las marionetas como intermediarios en la comunicación. Las marionetas abren una vía para la relación con los demás y el juego colectivo. En el juego con marionetas el niño también asume y entrena roles  que luego en un futuro aplicará en la vida real.

Cada edad utiliza las marionetas de una manera diferente,  los niños de cinco años prefieren representar los guiones creados por ellos de manera espontánea. Y cuando son más mayores van mimetizando historias leídas en cuentos o vistas en la televisión, etc. La representación de estas pequeñas obras dramáticas es un medio divertido  para:
  1. El desarrollo de la creatividad y la imaginación.
  2. Mejora la concentración y la capacidad de atención. La representación de una obra de títeres exige al niño recordar personajes y el orden de los sucesos, lo que demanda del niño el uso de toda su capacidad de atención y concentración.
  3. Son una herramienta ideal para transmitir valores. Al interpretar un personaje  los niños asumen los valores que aparecen en la obra y los hace propios.
  4. Desarrolla el lenguaje y las habilidades de comunicación.
  5. Fomenta la lectura.
  6. Desarrolla la capacidad de compresión. El niño necesita adaptar la obra original y para ello tiene que conseguir un elevado nivel de comprensión.
  7. Si en la obra aparecen varios personajes controlados por varios niños, la cooperación y la colaboración  será indispensable para conseguir representar la obra.

lunes, 5 de agosto de 2013

DESARROLLO DE HABITOS DE COLABORACIÓN EN CASA EN LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS


Formar hábitos de colaboración en casa en los niños  es tan importante como enseñarles a compartir, estudiar etc.…. Pues a través de ellas aprenderán a mirar  y a escuchar, y lo que es más importante, aprenderán a cuidar su entorno y a asumir responsabilidades.
Tenemos que partir de que a la mayoría de los niños cuando son pequeños les encanta participar en los quehaceres que realizan los adultos. Ayudar a papá o a mamá no es un aburrimiento, sino algo divertido que les hace sentirse importantes. Les gusta poner la ropa sucia en el cesto y los desperdicios en la papelera.
Tengamos en cuenta que el niño  no podrá adquirir el hábito de ayudar y colaborar en casa si hay alguien que siempre haga las cosas por él.
Las tareas deben ser apropiadas a la edad y capacidad de los niños y se irán modificando a medida que crezcan y aprendan a valerse por si mismos, Cuando los quehaceres cambien ellos serán capaces de pensar con ilusión nuevas responsabilidades.
Algunas sugerencias para que el niño desarrolle las actitudes y hábitos de colaboración.
  • Establecer el momento para que realice la tarea, Por ejemplo: que ayude aponer la mesa antes de comer o que recoja sus juguetes antes de bañarse
 
  • Mostrar al niño cómo ha de hacer el trabajo, explicárselo al tiempo que ser realiza y dejar que sea él quien lo remate
 
  • Elogiarle a menudo  ¡Estas poniendo las servilletas muy bien!
 
  • Si comete algún error ayudarle a llevar a cabo correctamente el trabajo ya volverá a practicarlo al día siguiente.
 
  • Tan pronto como el niño sepa realizar la mayor parte de la tarea es importante compensarle con cosas que le gusten.
 
  • No hacer jamás las labores asignadas al niño  si se le olvida: si se hace así no llegará a asimilar que son responsabilidad suya.